Sí, fuimos con todo. Orgullosos de hacer retornar los colores de la bandera a las calles y plazas de los municipios los estudiantes y trabajadores de la Universidad de Sancti Spíritus “José Martí Pérez” caminamos, como una buena parte de este heroico pueblo, este #1Mayo para ser fieles a la tradición de reafirmación y fiesta.
La pausa de dos años pandémicos tuvo cura radical y grandiosa. Esta vez estuvimos también en el espacio virtual, en las redes sociales, pero fuimos más. Salimos a las Plazas a darlo todo por la Revolución y por la fecha.
Nadie miró al suelo. La vista fija en el cielo azul de un mayo que se hace lluvioso y nublado a veces, pero que dio su sol radiante por buen rato para completar el deleite. La vista fija en un ajiaco de colores, generaciones, razas, oficios y credos, pero con un solo corazón y una sola mente. Gritamos, bailamos, nos dimos las manos y levantamos las banderas en las que tanto creemos.
Ha vuelto el alma al cuerpo, porque la multitud alegre y colorida del primero de mayo es parte esencial y necesaria de nuestra historia rectificada año por año. Haber estado allí en la multitud llena de energías el espíritu y da fuerzas para seguir haciendo lo que cada uno de nosotros tiene que hacer en su “Patria chica” del día a día.
Valió la pena ir con todo en ese pedazo de camino que no termina, que construye y consuela.